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Prestigio Informativo
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Por. Francisco-chino- Vásquez
Siguiendo con lo que declaró recientemente, Claudio Caamaño, Mayor de la patria, y combatiente de la guerra patria en Abril de 1965 contra las tropas interventoras Yanquis, diremos que parece mentira, o mejor será decir, que parece increíble, que hoy a 166 años de la separación de Haití, hayan personas y sectores de clase, que piesen y actúen como el renegado y traidor General Pedro Santana y su grupo de ateros, quienes siendo organizadores y participantes activos de la gesta libertadora del poder haitiano, traicionaron a sus compañeros de lucha, haciéndolos presos y acusándolos de traidores a la patria, desterrando a varios y fucilando a otros, para así poder negociar la anexión de la patria a la potencia imperial Española.
Esos traidores -Santanitas- se olvidaron de la acción de la noche del 27 de Febrero del 1844, cuando un grupo de valientes y aguerridos patriotas, hombres y mujeres, encabezados en ese momento, por Ramón Matías Mella y Francisco del Rosario Sánchez , e inspirados en el pensamiento libertador de Juan Pablo Duarte, quien estaba exiliado e impedido de entrar al país, lanzaron el trabucazo en la puerta de la misericordia, anunciando el nacimiento de la República Dominicana, de la que hoy, los buenos dominicanos nos sentimos muy orgullosos.
Esa traición del grupo santanita, trajo como consecuencias la gran guerra de la Restauración, en la que todos los dominicanos hicieron derroche de valentía y patriotismo, sacando a los extranjeros del territorio nacional.
Un caso parecido, sucedió en Abril del 1965, cuando un grupo de militares jóvenes, apoyado por la mayoría de la población civil, trató de restaurar en el poder al gobierno constitucional salido de las urnas en las elecciones del 20 de Diciembre del 1962 y que estaba encabezado por el Profesor Juan Bosch, ese gobierno fue derrocado el 20 de septiembre de 1963 mediante un cruento golpe de Estado militar auspiciado por el imperio norteamericano en contubernio con la Iglesia Católica, la oligarquía criolla y parte de las fuerzas armada dominicana.
Esa situación produjo un estado de inseguridad absoluta en la sociedad dominicana , la que casi inmediatamente, comenzó a organizar la resistencia para enfrentar a los golpista traidores a la institucionalidad, y como dijimos, un grupo de militares jóvenes apoyado por la población civil, trataron de restaurar la constitución del 1963 y aunque fueron reprimidos sin contemplaciones, derrotaron a los golpistas, los que fueron salvados por la intervención de las tropas Yanquis que invadieron el país con 42000 efectivos militares equipados, los cuales fueron enfrentados con valentía y patriotismo, por los militares y civiles constitucionalistas.
Siguiendo con lo que declaró recientemente, Claudio Caamaño, Mayor de la patria, y combatiente de la guerra patria en Abril de 1965 contra las tropas interventoras Yanquis, diremos que parece mentira, o mejor será decir, que parece increíble, que hoy a 166 años de la separación de Haití, hayan personas y sectores de clase, que piesen y actúen como el renegado y traidor General Pedro Santana y su grupo de ateros, quienes siendo organizadores y participantes activos de la gesta libertadora del poder haitiano, traicionaron a sus compañeros de lucha, haciéndolos presos y acusándolos de traidores a la patria, desterrando a varios y fucilando a otros, para así poder negociar la anexión de la patria a la potencia imperial Española.
Esos traidores -Santanitas- se olvidaron de la acción de la noche del 27 de Febrero del 1844, cuando un grupo de valientes y aguerridos patriotas, hombres y mujeres, encabezados en ese momento, por Ramón Matías Mella y Francisco del Rosario Sánchez , e inspirados en el pensamiento libertador de Juan Pablo Duarte, quien estaba exiliado e impedido de entrar al país, lanzaron el trabucazo en la puerta de la misericordia, anunciando el nacimiento de la República Dominicana, de la que hoy, los buenos dominicanos nos sentimos muy orgullosos.
Esa traición del grupo santanita, trajo como consecuencias la gran guerra de la Restauración, en la que todos los dominicanos hicieron derroche de valentía y patriotismo, sacando a los extranjeros del territorio nacional.
Un caso parecido, sucedió en Abril del 1965, cuando un grupo de militares jóvenes, apoyado por la mayoría de la población civil, trató de restaurar en el poder al gobierno constitucional salido de las urnas en las elecciones del 20 de Diciembre del 1962 y que estaba encabezado por el Profesor Juan Bosch, ese gobierno fue derrocado el 20 de septiembre de 1963 mediante un cruento golpe de Estado militar auspiciado por el imperio norteamericano en contubernio con la Iglesia Católica, la oligarquía criolla y parte de las fuerzas armada dominicana.
Esa situación produjo un estado de inseguridad absoluta en la sociedad dominicana , la que casi inmediatamente, comenzó a organizar la resistencia para enfrentar a los golpista traidores a la institucionalidad, y como dijimos, un grupo de militares jóvenes apoyado por la población civil, trataron de restaurar la constitución del 1963 y aunque fueron reprimidos sin contemplaciones, derrotaron a los golpistas, los que fueron salvados por la intervención de las tropas Yanquis que invadieron el país con 42000 efectivos militares equipados, los cuales fueron enfrentados con valentía y patriotismo, por los militares y civiles constitucionalistas.
Entre los militares combatientes contra las topas Yanquis, estuvo el mayor de la patria- Claudio Caamaño.-
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